28 de octubre de 2013

Mamá... ¿pupa?

- Mamá... ¿pupa?. -LY hace el signo de dolor y me mira esta mañana con esos ojazos negros que brillan de curiosidad.-.
- Si, bebé, la mamá tiene pupa.
- ¿Pupa ahí? - dice mientras se señala la nariz.
- Si, pupa en la nariz - Le digo sin soltar el paquete de pañuelos que me acompaña a todas partes.
- ¡¡¡Ohhhhh!!! ¿Papá?
- Trabajando.

Estoy sentada en la cama, quitándome poco a poco el pijama porque me duele todo, y acordándome con admiración de todas mis amigas monoparentales. ¿Cómo lo harán en estos casos en los que te duasta hasta las pestañas?

Oigo pasitos apresurados que se alejan y que vuelven, pero sin risas. Que extraño. Levanto la mirada y descubro a LY con el cepillo del pelo. Me da una orden para que baje la cabeza. ¡Aún no me había peinado!. Con mucha suavidad, me cepilla dos veces el lado izquierdo. Luego hace lo mismo en el otro lado. Suelta el peine y se me queda mirando. De pronto sonríe y se le llena la boca diciendo: ¡Mamááááá´! mientras me hace varias veces seguidas el signo de "guapa" en la barbilla.

Yo me derrito. Mi pequeño ángel sabe que hoy no estoy al 100%. Papá no está, hoy es un día realmente complicado para él, y este pequeño bicho que aún no ha cumplido los dos años y medio me está cuidando.

Le doy una caricia y le digo con toda la ternura que una madre puede decir: ¡GRACIAS!
LY se va corriendo contenta, diciendo su mezcla chino-española de gracias. ¡Xie-xias, xie-xias!. Cada día estoy más convencida de que lleva hablándonos chino 7 meses sin que lo sepamos.

Se emociona con el gracias y en sucesivos viajes al cuarto de baño me trae más cosas. Una pastilla de jabón, mi pinza del pelo, una toalla. A cada viaje intenta hacerme algo con esos objetos. Intenta lavarme las manos con el jabón. Me seca con la toalla. Intenta ponerme mi peculiar pinza del pelo. Decido que ya es suficiente cuando viene con la piedra pómez y me señala los pies.

Hoy se deja vestir sin hacer travesuras. Se queda quietecita. Me sigue ayudando en lo que puede.
Nos vamos al médico. Cuando me llega el turno la siento en la silla de al lado y le hago el signo de que ese señor es médico, para la pupa de mi nariz. Entonces LY se le encara.

- faejàlkjeidcañlkasdaief mamá pupa dhwsoiuhqwlasdov ahí (señala su nariz). Y se sienta.

El médico y yo nos miramos. Yo me río por dentro. Ella se queda quietecita mirando toda la consulta y muriéndose de risa cuando ve que me miran por dentro la garganta, como a ella. Al volver a sentarme se tira a mis brazos y ya no se baja.

Terminados, nos metemos en el coche. Vamos a casa de la iaia, y hoy es uno de esos días en los que duele mucho dejarla. Un día que estaré en casa pero sin ella, porque no estoy en condiciones de cuidarla. Ahora mismo echando de menos sus risas y su vitalidad, con la casa vacía, con un silencio ensordecedor, que sólo se llena con mis ataques de tos...

Laura Yu, la tía Laura y el pequeño Leo.
¡¡¡Bienvenido a la familia!!!

3 comentarios:

  1. Susana, espero que te mejores, yo también llevo toda la semana con tos, totalmente afónica y con el cuerpo molido, creo que nuestros peques nos han contagiado los virus que pillan en el guardería.
    LY es un encanto, y la foto con su tía y con su primo es preciosa, enhorabuena a toda la familia.

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    1. Estos niños nos van a contagiar de todo este año con la guarde. A ver si al menos, con la fiebre crecemos nosotras algo, no? Es que si no, no le veo ventajas...

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  2. Mejorate!!! Y exprime esos instantes. Abrazos.

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